Palabras clave:
Arte Guna, Oswaldo De León Kantule, mitos, ritos, religión
Resumen
La universalidad de su obra y su singularidad residen en que Oswaldo De León Kantule explora con su arte mitos esenciales de su pueblo, como el de la creación, que tiene paralelismos con casi todas las culturas del mundo, pero además plasma lo que sabe, lo que escuchó narrar y cantar a sus padres y a sus abuelos, y lo que ha venido adquiriendo gracias a sus propias investigaciones. La cultura kuna no tiene separación del cielo y la tierra, coincidiendo con otras culturas de Mesopotamia y el antiguo Egipto. La muerte es la continuación de la vida. En la obra del pintor Kantule, las hamacas conducen a las almas al otro mundo, que ocurre de manera horizontal, sin cielo o infierno. Así como la muerte, el artista explora también la creación del universo, la dualidad del hombre y la mujer, y la relación del individuo y la naturaleza. En la cultura kuna, a diferencia de la llamada cultura occidental, la persona no posee alma integral: tiene sin embargo una especie de fragmentos que la componen, como si de un rompecabezas se tratara. La religión y el mito se mezclan y se hacen uno. Los diferentes planos de la existencia, tanto en el cielo como en sus diferentes mundos, son fundamentales para la interpretación mágico-religiosa de la obra del pintor. Es necesario acercarnos a su cultura para entender su obra.